Cómo lidiar con las tentaciones

En el artículo introductorio , hablamos sobre la psicología del cerebro y las emociones en el trading y aprendimos algunas reglas básicas para evitar las trampas emocionales. Ahora veamos cómo podemos hacer que nuestros pensamientos y emociones trabajen a nuestro favor.

Es imposible no sufrir ninguna pérdida

Incluso el mejor trader del mundo toma malas decisiones (puedes ver algunos ejemplos aquí y aquí ). Si estás buscando la utopía de "0% de pérdidas", estás buscando en vano. Cuanto más te enfoques en tus pérdidas, más probable será que dejes que el miedo, el nerviosismo y las emociones negativas te ahoguen. Lo mejor que puede hacer un trader es maximizar las ganancias y, al mismo tiempo, minimizar las pérdidas. Esto reduce significativamente la tensión a la que se somete, y le permite pensar con claridad y tomar mejores decisiones.

Las pérdidas traen consigo lecciones valiosas. La gestión del riesgo, del tiempo y de las emociones, la comprobación de estrategias y la familiarización con determinados mercados pueden ser algunos buenos ejemplos. Tradear es una habilidad, y mejorarás con la práctica.

Espejito, espejito...

Algunas personas se machacan por haber hecho un trade que generó pérdidas (no te recomendamos que hagas eso), y otras echan toda la culpa al mercado. Un mercado es un lugar donde la gente se reúne para comprar y vender algo, por lo que tú, como trader (alguien que compra o vende un bien o un contrato), formas parte del mercado. ¿Ves como no tiene sentido culparte a ti mismo otra vez?

Sí, puedes verte afectado por el “ruido” del mercado, que no es más que otra palabra para referirse a la información confusa o engañosa, pero no tienes por qué actuar en consecuencia. Esperamos que, ahora que te lo recordamos, te des un tiempo para tranquilizarte y verificar las noticias antes de realizar un nuevo trade.

También es recomendable tener en cuenta las acciones de los demás como guía sobre lo que ocurriría si siguiéramos el mismo camino. El comportamiento en masa es a menudo susceptible de engaños; por ejemplo, algunas ballenas pueden hacer un scamwick (hacer grandes órdenes en short) en respuesta a las malas noticias para atraer a los que siguen esto rápidamente, para luego abrir órdenes en long lo suficientemente grandes como para destruir a las órdenes en short de los degens. Tras esa barrida del mercado, se mantienen en short. El concepto del concurso de belleza de Keynes nos recuerda que debemos elevarnos por encima del ruido y controlar nuestros impulsos. Solo entonces podremos hacer los mejores movimientos tácticos y tener éxito.

Mantener la disciplina

La mejor estrategia de trading es la que se prueba una y otra vez con el tiempo y la que mejor se adapta a tus preferencias personales en términos de tolerancia al riesgo, capital disponible, tiempo dedicado al trading, etc. Sin embargo, sin disciplina, es decir, sin la determinación de aferrarte a tu estrategia independientemente de lo que ocurra a tu alrededor, acabarás realizando un montón de trades irrelevantes, con muchas probabilidades de perder como resultado de una respuesta emocional. Por supuesto, tu estrategia debe ser lo más completa posible y consistir en un esquema detallado de gestión de riesgos para que puedas reaccionar con confianza independientemente de la dirección de los mercados.

Volviendo al manejo de las emociones en el trading, es necesario que los traders aprendan a dejarlas ir y venir. Observarse a uno mismo periódicamente ayuda a tomar conciencia de la guerra interior en los momentos críticos, lo que reduce al mínimo la probabilidad de realizar un movimiento destructivo impulsado por el momento. También les da la pausa necesaria para alinearse con su plan de trading. Al fin y al cabo, no se trata de interpretar al mercado correctamente todo el tiempo, sino de tomar la decisión correcta con la mayor frecuencia posible para alcanzar el éxito en el trading a largo plazo.

Descargo de responsabilidad: Las opiniones expresadas en este artículo tienen solo fines informativos. Este artículo no constituye un respaldo a ninguno de los productos y servicios analizados ni un asesoramiento de inversión, financiero o de trading. Se debe consultar a profesionales calificados antes de tomar decisiones financieras.